Cuando este gatito gay es abordado en la calle por un tendero, primero intenta deshacerse de él. Pero el hombre insiste y acaba intrigándole mostrándole un hermoso talismán que lleva colgado del cuello. Esta es una oportunidad para mostrar al joven gay que tiene un hermoso torso varonil bronceado. "Tienes unos bonitos labios", comenta. Es todo lo que hace falta para que el joven se ofrezca a chuparle la polla para conseguir el objeto. Se aíslan en un cobertizo para terminar las negociaciones. Para ganar el talismán, ¡tendrás que trabajar duro! El chico imberbe e inexperto se deja tomar la mano y bombea la gran polla del hombre hasta su garganta, dominándolo suavemente. Grandes mamadas, lamidas de culo profundas: se entrega a fondo para dar placer al mercader vicioso. Lógicamente, renuncia a la inocencia de su culo prieto: ¡no se queda atrás! Desgarrado por todos los orificios, ¡se ha ganado su talismán!