Desde que ha visto a Kameron FROST, el bombón británico Riley TESS no puede dejar de pensar en la estrella del porno. Un día me llama: "Jess, voy para allá a probar la polla gorda de Kameron, ¿vale?". Así fue como Riley acabó en suspensorio, con el chándal bajado, ¡esperando a que llegara el semental para follárselo!